Desde ayer ya camino sin muletas, después de cuatro meses. ¡No está mal! Pero la verdad es que al andar parezco una "muñeca de Famosa"; pero poco a poco, si Dios quiere, lograré andar mejor que antes de que me operaran.
Me viene a la cabeza lo que me dice una amiga: ¿pero te vas a quedar bien, sin dolor?, tú pregúntalo al médico. Yo le digo que espero que sí, pero que en medicina no se puede asegurar nada, tan tajantemente. Ella no lo entiende.
Quizás yo lo vea así porque soy de la profesión; pero de todas formas pienso que en temas sanitarios no se puede buscar el producto perfecto como cuando compras una mercancía.
En el fondo deseamos que sea así, pero eso es imposible, porque cada persona reacciona ante el mismo tratamiento de forma distinta. De esto todos tenemos experiencia.
A todas estas espero quedarme mejor que estaba; yo ahora lo que me toca es hacer ejercicio con el pié y que Dios reparta suertes.
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