martes, 16 de junio de 2009

Malas noticias

En mi trabajo a veces se tienen que dar malas noticias. Cada día observo lo mal que lo pasan los médicos cuando tienen que hacerlo. Y también observo las distintas reacciones de los pacientes y familiares: negación, agobio, miedo...; pero también aceptación, animo, reto para combatir... Muchas veces no tienes nada que decir solo estar ahí para acompañar, escuchar, y si es posible animar.
Y muchas veces si estás a lo que venga sin huir, se aprende mucho, se ve que hay muchas personas que dicen "¿por que a mi?"; pero también hay otras que dicen "¿y porque no a mi?"

No hay comentarios:

Publicar un comentario